Algunos sueños se hacen realidad

 

Se empieza a escapar el verano y yo, como siempre…sigo soñando.

En mis sueños todo es perfecto y los besos saben como en aquella tarde de Julio, cuando recorrimos juntos París.

Es bonito descubrir que a veces los sueños también se cumplen…una sorpresa, un deseo hecho realidad, volver a la ciudad del amor contigo y llevarte a pasear bajo los puentes, subir a Montmartre, descansar en la terracita de algún café cerca de Notre dame, rozar suavemente el cielo.

 

Ha sido un viaje fugaz y al mismo tiempo se ha quedado detenido para siempre en un instante, eterna, irremediablemente, como en esta foto a los pies de la Torre Eiffel… Me recuerda ahora, al deslizarme arrastrando los pies por los primeros días de Septiembre, que he vivido una ilusión, cristalina, luminosa, mágica y que tú me la has regalado.

 

Gracias…