Veinte y Nueve

Ya está...15 de Septiembre otra vez y un añito más para la saca.

Me alegro de poder disfrutarlo, de entrar en el casi treinta en compañía de mi familia y mis amigos y celebrarlo aquí en Oviedo,una tradición que ya estaba rompiendo tras dos años pasándolo fuera.

Echaré de menos al niño guapo que fue corriendo el año pasado a comprarme las velas...pero no se puede pedir todo.

                

El veintinueve es un número que me encanta, así que diré, sin ánimo de tentar a la suerte, que creo que este va a ser un buen año.

Solo espero que cuando pase y llegue el próximo, no me caiga de repente encima un buen fardo de madurez, como siempre he temido...lo veo casi como atravesar la barrera del sonido,aunque en el fondo una cifra significa más bien poco. 

               

¿Qué más puedo contar?:fue una noche especial..no habíamos quedado con la intención de celebrar mi cumpleaños,pero al final tuve la sorpresa de las velas,el cava para brindar,el cumpleaños feliz a coro... no me faltó de nada y por supuesto,pedí un deseo que no voy a desvelar,por si acaso no se cumple.

Dejo guardadas aquí,en mi Caja de Tesoros particular,alguna de las fotos que sacamos durante la cena en el KIN, un restaurante con alma de club,que aprovecho para recomendar al que se deje caer algún día por Oviedo.

Una frase para pensar:

"Cumplir años es obligatorio pero envejecer es opcional"